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NOTA DE VREDONDOF : Este blog lo leen no solamente personas del Bierzo, para ellos , "los de fuera" , quiero aclarar "por donde van los tiros" de este articulo.
Van por el lado de ser PROPIETARIOS de los dos UNICOS periodicos de la provincia de LEON.
El Diario de Leon (propiedad deL Sr. Ulibarri , Dueño de BEGAR ) fue comprado al grupo VOZ a un precio que es imposible amortizar en 200 años y el SEGUNDO , la CRONICA DE LEON del Sr. Martinez Nuñez dueño de TECONA ( entre otras) , periodico que lo regalan en un ...% ... ... y que le da a su dueño GRANDES PERDIDAS.
Los dos, son grandes constructores ( entre otras cosas) y a la vez VIEJOS ENEMIGOS ( y grandes ) , no obstante supongo conozcan aquel que dice "PERRO NO COME PERRO".
Lo dos ESTAN IMPLICADOS EN GURTEL , pero ninguno de los dos periodicos ha publicado nada sobre GURTEL ni siquiera "lo del otro" , cosa habitual en otros asuntos (publicar lo que perjudica al contrario).
En este momento y por fin le estan sacando un gran rendimiento a estos periodicos , ya que son "SERVIDUMBRE" de sus "VALEDORES" domesticos ( y de los que nacieron) y ademas les sirve personalmente para tener "LA CORREA CONTROLADA" , eso si dinero estaran perdiendo "a punta pala".
George K. Chesterton dejó escrito en el ya lejano 1917: “Los periódicos comenzaron a existir para decir la verdad, hoy existen para impedir que la verdad se diga”.
No existía Internet, no imaginaba las nuevas tecnologías de la comunicación, pero ya debía conocer el ¿informe o dossier? que sobre El mundo de la comunicación y el marketing político en León ha caído en mis manos.
Dudo —en realidad lo afirmo— que algún día vea la luz. Las acusaciones que se hacen en él son gravísimas —vienen de lejos— y de muy difícil probatura, su autor o cualquiera que lo difunda podría acabar fácilmente en los juzgados.
Solo diré una cosa: la información veraz es un enemigo intolerable para los intereses de muchos de nuestros gobernantes y de algunos de nuestros empresarios. ¡Ay! Don Antonio (Canedo, alcalde de Camponaraya), otros vendrán que bueno le harán. No ha sabido Vd. adaptarse a los tiempos, ¿o sí?
¿Saben ustedes cuánto dinero (nuestro) reciben los medios de comunicación de las administraciones, empresas públicas o fundaciones radicadas en la provincia, por las llamadas campañas institucionales y cómo se pagan?
¿Saben de dónde saldrán los fondos para financiar alguna que otra campaña electoral?
Y así, hasta más de un centenar de preguntas. Tal vez si nos contestaran, empezaríamos a entender cosas como la gestión de los titulares (que establece el nivel de interés de las noticias en función de intereses poco confesables), los silencios inauditos, las sutiles mentiras o los biensonantes eufemismos.
Para eso y mucho más sirven determinados gabinetes, consultoras o responsables de comunicación.
Hay actividades que sería necesario poner fuera de toda sospecha, a las que hay que conceder una confianza presupuestaria, a las que conviene tratar como si no fuesen de este mundo, si es que queremos que siga valiendo la pena vivir en él, y una de esas actividades debería ser el periodismo. Pero por culpa de ciertos neocaciques municipales y autonómicos y de su modo de actuar, tendremos que volver a empezar desde el principio como si no hubiese habido ni fuego, ni rueda, ni imprenta, ni Ilustración.
Después de la barbarie actual de desinformación, manipulaciones y mentiras, debemos luchar por restaurar la confianza, que tanto costó y cuesta que eche raíces, en el periodismo, ya sea desde blogs, páginas web o digitales independientes. Aprovechemos también nosotros las nuevas tecnologías y no dejemos que colonicen nuestros cerebros.
A otra cosa, que en el fondo es la misma. Por fin he dejado de estar confundido y he comprendido el cabreo de don Luis J. Amigo, coordinador de la campaña electoral del PSOE ponferradino, por la columna que le dediqué en mi colaboración semanal en La Crónica de León (y eso que un servidor pensaba que era casi un panegírico): en las páginas de ese “informe” encontré algunas respuestas. Don Luis Jesús, estoy disponible para hacer de negro o de altavoz. Pero eso sí, cobrando.
Ah, y por si alguno todavía no se había dado cuenta, a un servidor, como junta letras, no le gusta ser sujeto pasivo en las relaciones carnales con el poder, con cualquier poder. A los asalariados del periodismo, que tienen que pagar una hipoteca, hacer frente todos los meses a los recibos del colegio, luz, etc..., en definitiva, que viven de su profesión, no se les puede exigir lo mismo. Pero un servidor no come de escribir, ni de la política.
PD. Si nuestros dirigentes quieren empezar a recortar ya saben por donde pueden empezar, total, para “comunicar” ciertas cosas con unas cajas de vaselina sale más barato y es menos doloroso.
